Adiós somnolencia, hola segundo trimestre

Un mes más de lo que calculaba tardó en acabarse la exagerada somnolencia del primer trimestre. Ahora con 16 semanas me siento mucho mejor, consigo levantarme de la cama por las mañanas sin demasiado esfuerzo y en raras ocasiones me echo alguna siesta diurna.
  

  
Las náuseas se fueron pero no del todo, cada tanto tengo algunas, pero es muy diferente tenerlas un ratito que pasar tres meses sin poder probar bocado por el asco a los sabores y olores.

Al final, no solo no subí ni un kilo, sino que bajé dos, y la verdad que no me vino nada mal porque había empezado el embarazo con 6 kilos más que cuando me quedé embarazada de las nenas. Estos años locos de excesos 😛

Sigo con mucha preferencia por frutas y verduras y rechazando la carne, los fritos y demás alimentos que huelen fuerte o alimentan poco. El pescado, sin embargo, no me provoca rechazo, y puedo hartarme de mariscos.

En resumen, me siento más normal, con algunos dolores de cuerpo, pero con más energía y ganas de hacer cosas.

El 9 de noviembre ya sabremos si es una niña o un niño, y yo la verdad que ni tengo preferencias, ni tengo percepción de lo que puede ser, como tenía con las nenas, que estaba SEGURA de que eran niñas desde el primer día de embarazo. Curioso.

Ya os contaré como sigue esto.