DIY: Como hacer una mesa rústica

Desde hace años mirábamos las mesas rústicas con mi marido deseando poder hacernos de una algún día, pero las veíamos carísimas, y para una familia numerosa con tantos gastos, una mesa de mil euros era un lujo innecesario. Fue una revelación total y absoluta cuando vimos que Leroy Merlín tenía la fórmula perfecta para hacerla nosotros mismos y de forma MUY fácil.

Os lo explico, Leroy Merlín vende maderas de pino rústicas, de un grosor considerable, que juntando dos, por ejemplo, te montas la mesa con las patas que quieras, o un banco, o un escritorio, una consola o lo que se te ocurra. Las opciones son infinitas y es realmente muy fácil incluso para personas sin experiencia.

Primer paso: elegir los tablones de pino bruto

Hay varias opciones de tableros de pino bruto, y cada opción tiene varias medidas. Nosotros elegimos tres tablones de tres lados rectos y uno rústico, dos para la mesa y uno para el banco, todos de 2 metros y 6 cm de alto.

Una vez elegidos los tableros de pino bruto, solo queda elegir las patas, pillar las pletinas y los tornillos. En principio para montar la mesa rústica solo se necesitan estos elementos. Eso sí, si tienes destornillador eléctrico todo será más fácil.

Segundo paso: montaje

En el caso del banco la verdad que fue súper sencillo: calcular distancia y poner tornillos. No tiene más misterio.

Con la mesa tuvimos que trabajar un poco más, pero nada, muy poquito más.

Pusimos 4 pletinas, aproximadamente una cada 50 centímetros de madera (la mesa mide 2 metros).

Una vez ajustadas pusimos las patas, pero es importante que cuando pongas las pletinas calcules bien el espacio que quedará para éstas. Nosotros pusimos 4 patas de acero en color negro mate con forma cuadrada, y en el banco pusimos 2, pero puedes elegir las patas que más encajen con tu estilo.

En este post verás cantidad de pelos de la perra :(, el verano la ha dejado medio calva, pobreta.

¡Et, voilá!

Tercer paso: lijar

Una vez que teníamos todo montado procedimos a lijar, que fue la parte que más trabajo nos dio. Ingenuos de nosotros, creímos que podíamos hacerlo a mano, pero por suerte nos dimos cuenta a tiempo de que había que hacerlo con una lijadora eléctrica. En este caso Leroy Merlín nos prestó una para poder hacer este trabajo.

Primero empezamos con la lija de decapar, una muy gruesa, para poder quitar toda la parte de astilla gruesa de la madera. Después acabamos con la lija fina de acabado, así que no usamos la intermedia.

No es un proceso complejo pero sí trabajoso, y hay que aplicar algo de fuerza para hacer (yo no lo hice sino que lo hizo Rodrigo enteramente).

En aquellas partes con más astillas hay que insistir un poco más pero sin forzar demasiado para que la lija no se «coma» el mueble». Sin embargo, en aquellas zonas donde la madera estaba un poco estropeada (lo rústico es así) , no nos importó que se redujera o que quedara más redonda.

 

Cuarto paso: barnizar

Nosotros elegimos un barniz mate con color roble claro, para dar el tono que nos gusta para los muebles del comedor y además asemejarlo a las sillas.

Barnizar es muy fácil y es el último paso, aunque hay quienes prefieren utilizar el tapaporos antes. Si no te gusta el tono del barniz o no lo encuentras, puedes también teñirlo con algún producto, pero mi consejo es que primero pruebes el tinte en alguna zona que no se vea, Yo misma casi cometo el error de poner un tinte que al final era muy oscuro cuando el barniz de tono roble claro me lo dejaba tal y como me gusta.

Otra opción alternativa al barniz es la cera de acabado, o quizás también prefieres pintarlo con chalk paint y darle otro tono diferente a la madera, colores o lo que se te ocurra. Las opciones son casi infinitas!

Lo hicimos todo con una brocha plana para barnizar de 70mm. Este barniz es de secado rápido y con una primera capa ya está súper protegido, aunque por lo porosa que es la madera nosotros le dimos una segunda capa 12 horas después. Doy fe de que ya ha aguantado líquidos y objetos, queda intacta.

Materiales usados

 

Y todo el proceso en vídeo

 

El resultado es este:

 

¿Te ha gustado, te atreves a hacerte tu propia mesa?