Lo mío con el Babyzen Yoyo+ fue amor a primera vista. Recuerdo haberlo visto estando embarazada, en un escaparate de una tienda por el barrio de Gracia, vestido con un saco de FundasBcn. Me pareció pequeño y estrecho, perfecto para una mamá bajita como yo.
Pero no sabía que cochecito era y lo busqué con los datos que tenía, hasta dar con él.
Usarlo ha sido tan genial como esperaba, porque es ligero, práctico, funcional y muy bonito.
Su principal ventaja es el tamaño, que permite pasear en ciudad por sitios muy concurridos sin ocupar mucho espacio: ascensores, centros comerciales, tiendas, y demás.
Para mi, que tengo dolores articulares crónicos y mido 1,53, ha sido de gran ayuda este cochecito que apenas pesa poco más de 6 kilos. Es estrecho y maniobrable, y en su versión de 0 a 6 meses ya hemos recorrido muchas calles con Óliver.
Mucho más que un cochecito para viajar, el Yoyo+ es un señor cochecito para tener desde el nacimiento hasta los 18 kilos y además poder llevarlo en cabina en todos tus viajes en avión, sin necesidad de despacharlo y tener que recorrer aeropuertos con bebés en brazos (o lo peor, niños pequeños que ya no son bebés pero se cansan).
Un apunte: es un cochecito que está muy bien balanceado, es decir, ni de casualidad se vuelca con el peso del bolso en el manillar como muchos otros cochecitos.
Nos hemos pasado todo el verano bajando a Barcelona con el Yoyo en metro y por el centro.
En el modo o-6 va totalmente tumbado y de cara a los padres, lo cual es lo indicado para los bebés menores de 6 meses, aunque «nos pidan» ir más incorporados. Como alternativa no recomiendo incorporarlos, en todo caso la solución es un portabebés.
La capota es pequeña pero tapa muy bien la luz y el sol cuando duerme. Funciona con clips.
En terrenos pedregosos se comporta muy bien por ser un cochecito de ciudad. Eso es gracias a su suspensión en las 4 ruedas.
En transporte público ocupa muy poco espacio y pasa perfectamente por los pasillos estrechos.
El modo capazo va con arnés de 5 puntos y lleva un saco de polar para proteger al bebé. Nosotros no llegamos a usarlo porque se nos vino el verano encima.
Óliver se dormía como un bendito en su Yoyo+.
En cuanto a colores de momento tenemos entre 6 para elegir: fucsia, azul, negro, gris, beige y rojo-naranja, pero en 2017 entran dos colores chulísimos: un rosa asalmonado y un verde musgo con corderito.
Y la novedad: el patinete!
El YOYO+ trae un protector de lluvia y además tiene otros tantos accesorios que se pueden comprar aparte.
Y hasta aquí mi experiencia con la etapa capazo del cochecito, ya os contaré mi experiencia con la silla de 6 meses en adelante que aun no la estrenamos .
